Cómo operar en el par euro/yen japonés
El método más sencillo es comprar o vender una colección de billetes en euros o yenes japoneses en su banco en forma física o, más sensatamente, a través de una cuenta comercial en línea. Este puede no ser un enfoque muy innovador o lucrativo, pero es, quizás, uno de los métodos más fáciles para quienes recién se inician.
Otra opción a menudo popular es el comercio de futuros, en el que podrá operar con el tipo de cambio sin tener que poseer el activo. Aunque parezca bastante simple, estas posiciones conllevan un gran riesgo. Una operación que vaya en contra de la especulación inicial del comerciante podría acabar con su saldo.
Quizás, la forma más segura es negociar contratos por diferencia (CFD) a través de un corredor experimentado y regulado, como CMTrading. Cuando opera con este tipo de contrato, estará especulando sobre el valor del par de divisas con el que abrió su posición financiera frente a su valor cuando cerró la operación. Al operar con estos productos apalancados, solo necesitará invertir una fracción del costo real.
Uno de los pares de divisas más populares en el mercado cambiario es el euro/yen japonés. Representa alrededor del 3 % de todas las transacciones diarias de divisas y es el séptimo par más negociado del mundo.
Los inversores y comerciantes aprecian el par de divisas euro/yen japonés debido a los altos niveles de volatilidad en ambas divisas. Esto puede ofrecer muchas oportunidades comerciales.
¿Qué factores influencian el par euro/yen japonés?
¿Qué aspectos se deben tener en cuenta cuando se opera con el par euro/yen japonés?
Tal como sucede con la mayoría de las regiones, muchos factores pueden tener efectos colaterales en la divisa vinculada. Al tratar del del euro, por ejemplo, será necesario considerar toda la economía europea.
Factores que afectan el euro
Al igual que la mayoría de las divisas modernas, los principales factores que influyen en el precio del euro son en esencia de tipo económicos y políticos. El clima europeo es bastante estable y, como tal, no tiene tantas presiones ambientales.
Los informes mensuales publicados por el Banco Central Europeo son muy importantes para operar con el euro. Estos informes pueden afectar el movimiento de los precios de la divisa. Los buenos comerciantes utilizarán los informes del BCE tan pronto como se publiquen y determinarán hacia dónde podría «dispararse» la moneda europea.
El empleo puede jugar un papel muy importante en las tasas del euro. La Unión Europea representa a una gran cantidad de países miembros y la salud de uno de ellos afecta, sin duda, a toda la región. Otro factor que debe considerarse es la inestabilidad política derivada de Europa del Este. La agresión rusa ha desestabilizado, en gran medida, la región en 2022 y tendrá efectos volátiles en el euro en los próximos años.
Operar con el yen japonés
La economía de Japón está bastante ligada a todo el mercado asiático. La salud general de la economía japonesa juega un papel muy importante en el poder de su divisa. El comercio de importación y exportación en Japón impulsará o colapsará el yen.
Una influencia importante en el país asiático es el índice de desastres naturales que ocurren en la región. Debido al pequeño tamaño de la isla, los desastres naturales, como los terremotos y los tsunamis, pueden afectar en gran medida el valor de la moneda.
Afortunadamente, el gobierno de Japón a menudo utiliza iniciativas económicas para impulsar su economía y la estructura política en líneas generales es estable. Muchos comerciantes e inversores prestan mucha atención a las tasas de interés que afectarán el comercio en la región. El Banco de Japón es una institución financiera que se vigila muy de cerca.
¿Sabía que…?
A lo largo de los años, el valor de mercado del yen japonés experimentó muchos altibajos.
En 1897, la divisa japonesa equivalía a 50 centavos estadounidenses. El gobierno japonés adoptó el oro como patrón ese modelo ese mismo año, que se convirtió en el valor del yen.
El yen se fijó al dólar estadounidense en 1949 y perdió gran parte de su valor de mercado cuando el gobierno de Estados Unidos decidió abandonar el patrón oro en 1971.